Los mejillones son mucho más que un aperitivo irresistible. Son un sabroso bocado bien sea en forma de tapa, como entrante o bien como ingrediente destacado acompañando cualquier plato de refinada elaboración, el mejillón nunca desentona. Por sus valores nutritivos y sus enormes posibilidades en la cocina los mejillones, como todos los moluscos gallegos, se hacen querer porque es un plato atractivo en cualquier acontecimiento.
Con toda seguridad el lector podrá apreciar que me puede mi amor por Galicia, su cultura, el paisaje, la buena gente y el buen marisco de sus rías y costas. En el transcurso de un viaje inolvidable a esta región tuve ocasión de apreciar los buenos presagios que hoy manifiesto.
Conocí insitu las rías y sus bateas, llamándome especialmente la atención las kilométricas extensiones de agua que dedican a este cultivo. Igualmente, disfrute de su marisco y de sus ostras preparadas con esa habilidad que caracteriza a esas mujeres gallegas curtidas en las rías.
Sin olvidar mencionar los vinos producidos en Cambados. Toda una sabia combinación la que nos ofrece la madre naturaleza con los productos de la tierra y la mar de esta región. Dicho en palabras de gourmet todo un maridaje perfecto.
Siguiendo con el producto que hoy nos ocupa tengo que hacer mención al mejillón gallego como uno de los productos mas consumidos en nuestro país durante todo el año. Siendo la forma mas común de prepararlos cocidos al vapor y acompañados con unas gotas de limón, o como en este caso con una pipirrana aderezada con aceite de oliva, vinagre y sal, y servida en la misma concha con el mejillón.
Para prepararlos al vapor debemos primero lavarlos bien, y con ayuda de un cuchillo raspar la concha y quitar las barbas que suelen traer adheridas. Ponemos una olla al fuego y los introducimos. Como cada maestrillo tiene su librillo, o sea su técnica, diré que hay quien pone un poco de agua en la olla para ayudar a la cocción acompañado de unas hojas de laurel, incluso hay quien en la cocción los riega con un vaso de vino blanco. En mí nombre tengo que decir que este alumno de cocineros los cuece al vapor sin mas, eso si, cuidando de ir sacando los mejillones conforme se abren y observando que estén hechos. Es sabido que en la familia de los bivalvos no hay una ley física que indique que todos se abrirán a la vez. Por esta razón, recomiendo ir sacándolos conformen se vayan haciendo porque que no hay peor visión, y gasto mas inútil que unos mejillones encogidos por exceso de cocción.
La mayor parte de los mejillones que se venden en los mercados de nuestro país proceden de la acuicultura. La época de recolección depende, entre otras razones, de su destino. Así, el mejillón destinado a conserva y a las empresas procesadoras (que representa el 65% del total), se recolecta generalmente en verano; mientras que el destinado al consumo en fresco (un 35 % de la producción anual) se recolecta preferentemente durante el otoño y el invierno.
Para terminar nos dejamos acompañar con la poesía hecha canto en la voz de este genial trovador gallego que es Amancio Prada.
3 comentarios :
Megustaron tus recetas de marisco ,tines razon que los mejillones los mejores los de mi galicia los tengo mañana para hacerlos con una buena salsa de tomate hecha por supuesto en casa pruebalos estan mui buenos
Pués si Maruxa Maruxela,lo digo y lo mantengo y no me puede el amor a tu tierra pero las rías gallegas producen los mejores mejillones.
La próxima ocasión probare a hacerlos como me indicas y te comentare el resultado.
Saludos.
A mi me pones un plato así de mejillones y sinceramente...no me aguanto...me convences.
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