Desde que comienza el verano no me faltan en el frigorífico los afamados "tomates de Montilla". Se trata de una variedad de tomate que los mas antiguos hortelanos consideran autóctona de esta zona. De carne rosacea y escasas pepitas, su piel es muy fina, y su sabor inigualable, resultan ideales para tomarlos en crudo, bien en ensaladas o cortados en media luna con sal gorda y una pizca de pimienta por encima, y si se le ponen unas anchoas el resultado es una tapa refrescante y deliciosa. También los ejemplares mas maduros y rojos son ideales para elaborar el gazpacho y el salmorejo.
Es tanta la demanda de estos tomates que hasta su precio también es diferente. Y se pueden ver perfectamente dispuestos por los puestos del mercado de abastos, donde los venden mas caros que otras variedades de tomates.
El tomate es sinónimo de verano, sobre todo el tomate que se cultiva en las huertas, y el tiempo óptimo de su recolección se lleva a cabo durante los meses de julio y agosto.
A veces, uno recibe un agradable regalo como estos hermosos tomates, y es que para algo debe de servir tener amigos hortelanos. Gracias, Agustín.
Es tanta la demanda de estos tomates que hasta su precio también es diferente. Y se pueden ver perfectamente dispuestos por los puestos del mercado de abastos, donde los venden mas caros que otras variedades de tomates.
El tomate es sinónimo de verano, sobre todo el tomate que se cultiva en las huertas, y el tiempo óptimo de su recolección se lleva a cabo durante los meses de julio y agosto.
4 comentarios :
Hoy, como muchas noches, mi única cena es una buena ensalada de tomate y cebolleta.
De lo mas sano y natural, que de grandes cenas están las sepulturas llenas.
Se me hace la boca agua de sólo ver los tomates, lástima que este verano no esté siendo muy bueno para los tomates en Montilla.
Un saludo.
Forajido, comparto contigo esta afición desmedida al placer que supone saborear un buen tomate. Me encantan, y si son de las huertas de Montilla, ni te cuento.
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